los tintes naturales que vamos a usar son café, te y manzanilla, y los tiempos del baño serán de 2 minutos, 10 minutos y 20 minutos para así conseguir distintas intensidades de un mismo tono (marrón, rojizo y amarillo respectivamente)
el papel japón que vamos a tintar es de dos gramajes distintos:
el fino es de 9g/m2 y el grueso de 35g/m2
para saber con qué tinte hemos teñido el papel y de cuántos minutos ha sido el baño
lo anotamos a lápiz en una esquina (tanto en el de 9g como el de 35g),
empezamos la pila con un reemay, luego ponemos los papeles que van a estar 20 minutos, uno delgado y uno grueso, después otro reemay, luego un japón grueso y uno delgado que van a estar 10 minutos en el baño, otra capa de reemay, encima de este ponemos el japón grueso y el delgado que van a estar 2 minutos y cerramos de nuevo con un reemay
echamos la infusión de manzanilla (con 4 bolsitas por 1 litro y medio de agua) y
hacemos entrar el conjunto de reemays y papeles en el baño como si se deslizaran de arriba a bajo paulatinamente para evitar la creación de bolsas de aire en el interior y conseguir que el tinte llegue a empapar de forma homogénea a todo el papel japón
si detectamos burbujas de aire con la ayuda de un pincel las podemos eliminar sumergiendo el conjunto
baño de manzanilla
baño de te
baño de café
cuando han pasado 2 minutos retiramos la primera capa de reemay y papel japón (al estar mojado queda pegado), cuando han pasado 10 minutos retiramos la segunda capa de reemay y papel japón y a los 20 minutos retiramos la tercera capa
dejamos que escurra un poco..
el reemay es ideal para maniobrar con un papel que sería imposible manipular sin que se rompìera por su fragilidad al estar mojado
y lo tendemos en la parrilla de secaje
ahora podemos dedicarnos a la consolidación de las hojas del libro que estuvimos
lavando, blanqueando y desacidificando la semana pasada.
preparamos cola tylosa (tirando a una consistencia clara)
para realizar esta acción que aportará apresto al papel y consolidará sus fibras
empezamos haciendo una cruz con la brocha, después encolamos atravesando el papel en diagonal y seguimos encolando siempre del centro hacia fuera de la hoja asegurándonos de que no queda ninguna zona seca que provocaría tensión en el papel debido a la dilatación que sufre al ser encolado
es fácil detectar qué zona del papel está seca o encolada porque cambia mucho el color
trabajando en equipo..
a medida que el papel va siendo encolado lo vamos dejando secar en la parrilla
en la próxima sesión veremos qué papel de los que hemos teñido hoy nos conviene para reparar los desgarros o zonas perdidas de las hojas del libro y cómo llevar a cabo tal reparación
¡hasta el miércoles que viene!